Términos como Co-working o Co-housing comienzan a ser habituales en nuestro vocabulario. De nuevo, los desorbitados precios sobre el espacio en las grandes ciudades hacen que cada día se planteen nuevas fórmulas para vivir, trabajar o relacionarse.
Barcelona es sin duda uno de esos casos, en los que el turismo masivo ha elevado de un modo tan especulativo el precio de las viviendas que apenas hay posibilidad de alquilar en la ciudad.
En una ciudad como Londres, ya proponen alternativas a la ausencia de posibilidades de tener una casa de concepto tradicional.
THE COLLECTIVE OLD OAK crea lo que se conoce como Co-living, en el que propone un gran espacio en forma de comunidad, con numerosos y versátiles espacios comunes (para trabajar, leer, descansar, hacer la colada, comer, networking etc) y un pequeño espacio privado a partir de 12 m2 y desde 250 Libras a la semana.
A primera vista, todo parecen ventajas, sin embargo, la polémica está servida. Por un lado se crea una conexión entre los habitantes de esta comunidad compartiendo espacios y momentos del día, por otro, éste formato ¿no está fomentando exclusivamente la individualidad? con espacios privados tan pequeños ¿cómo se puede pensar en ser una familia?
Por momentos, estas habitaciones me parecen inspiradas en el apartamento de Korben Dallas (Bruce Willis) en la famosa película de ciencia – ficción de los 90, El quinto Elemento…
¿Será así nuestra vida en un futuro no muy lejano?
Feliz semana!
*Las imágenes que aparecen en esta publicación y no se especifican como propiedad de la autora, pertenecen a redes sociales