Lleva años siendo una estrella. Procede del momento histórico (50’s) en el que se inventó la «Modernidad» para acabar con los clásicos y sin embargo se ha convertido precisamente en eso, todo un clásico.
Su aspecto aristocrático nace en los mejores talleres de diseñadores como Arne Jacobsen, Eero Saarinen o Hans Wegner para llegar a todos los hogares, aportando funcionalidad y buen precio (ahora no tanto, algunas piezas sobrepasan los 10.000 €). Sin embargo hay algo que sigue conservando, y es su versatilidad para mezclarse con cualquier estilo. No importa si se trata de una decoración nórdica, vintage o industrial, tampoco si el resto de los muebles son de IKEA o de Vitra y por supuesto puede colarse en cualquier estancia de la casa, él siempre encaja…
En recibidores
En Salones, como auxiliar o para TV
En Dormitorios
Por supuesto, en Baños…
Y porqué no en una Babyroom?
4 aparadores para conseguir el look
Aparador bajo Botello – La Redoute
Aparador de nogal Siurana – La Redoute
Aparador vintage de roble macizo – Maisons du Monde
Aparador Berkley – Maisons du Monde
Feliz Semana!
*Las imágenes que aparecen es esta publicación, y no se mencionan como propiedad de la autora, pertenecen a redes sociales
La verdad que el efecto de este mueble es impresionante…transforma y aporta caracter a cualquier estancia. No se me habia ocurrido en el lavabo. seria una alternativa elegante. un abrazo.
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Totalmente de acuerdo contigo, es impresionante. Para el baño, la única consideración es tener en cuenta es que es necesario proteger la parte superior con una encimera, por ejemplo, de mármol . Un beso!
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